Para contribuir a la efectividad de todo tratamiento es importante que cada paciente conozca estos diez puntos clave, con el fin de tener una mayor comprensión su dolor.
1. ►► Aparición del dolor. Registrar la fecha de inicio
2. ►► Localización. Definir qué región del cuerpo afecta el dolor
3. ►► Intensidad. Clasificar el dolor dentro de una escala del 1 al 10, donde 0 es ausencia del dolor y 10 es un dolor insoportable.
4. ►► Características. Definir si el dolor es punzante, si produce ardor, si es intermitente, si es constante, etc.
5. ►► La irradiación. Advertir hacia dónde va el dolor: si está localizado o si se va, por ejemplo, hacia un miembro del cuerpo, hacia el abdomen o hacia una región de la columna o de la cabeza, etc.
6. ►► Qué lo calma. Si al tomar determinada posición el dolor se calma, o al utilizar fármacos.
7. ►► Qué lo exacerba. Que situaciones acrecentan el dolor, por ejemplo, ciertas posiciones/posturas, el hecho de caminar, de pararse, o sentarse, etc.
8. ►► Preguntarse: ¿El dolor altera el ritmo mi habitual de vida? ¿Puedo realizar actividad física?
9. ►► Preguntarse: ¿El dolor produce depresión?
10. ►► Tener en cuenta la existencia de enfermedades concomitantes, es decir, si la persona padece de enfermedades como artritis reumatoidea, diabetes, anemias, etc.
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