Es el caso de una paciente con una osteoatritis severa de rodilla izquierda que le generaba dolor. Se le había indicado un reemplazo total de rodilla, siendo una cirugía de riesgo por tener comorbilidades.

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La paciente no podía dormir del dolor, no podía movilizarse por alteraciones en la marcha.

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Para su tratamiento en Tidol, se le realizó una radiofrecuencia de los nervios geniculados de la rodilla izquierda. Además, se le colocó Plasma Rico en Plaquetas (PRP) interarticular, todo bajo fluoroscopía.

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En la imagen se ve la profundidad en la que se encontraron los nervios geniculados.

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Al realizar el tratamiento, la paciente pudo aliviar su dolor en un 90%.